Latigazo cervical

Latigazo cervical

El latigazo cervical es una lesión que se produce por un movimiento rápido y enérgico del cuello, hacia atrás y hacia adelante, como el chasquido de un látigo.

El latigazo cervical es comúnmente causado por los accidentes de auto por detrás. Pero el latigazo cervical también puede ser el resultado de accidentes deportivos, abuso físico y otros tipos de traumatismos, como una caída. El latigazo cervical también se conoce como esguince de cuello o distensión de cuello, pero estos términos también incluyen otros tipos de lesiones del cuello.


La mayoría de las personas con latigazo cervical mejoran en pocas semanas siguiendo un plan de tratamiento que incluye analgésicos y ejercicio. Sin embargo, algunas personas sufren dolor crónico de cuello y otras complicaciones de larga duración.

Por lo general, los signos y síntomas de la hiperextensión cervical comienzan a manifestarse pocos días después de la lesión y pueden ser los siguientes:

La lesión se produce normalmente cuando la cabeza se desplaza hacia atrás y luego hacia adelante en un movimiento enérgico y rápido. Este movimiento puede dañar los huesos de la columna vertebral, los discos entre los huesos, los ligamentos, los músculos, los nervios y otros tejidos del cuello.

Este tipo de lesión puede deberse a lo siguiente:

Al ser causada por un hecho repentino, es difícil prevenir el latigazo cervical por completo. Sin embargo, es recomendable mantenerse físicamente activo con ejercicios que tonifiquen los músculos de la espalda y el cuello. Si los músculos están en forma será más fácil volver a una condición óptima. Además, para evitar movimientos bruscos hacia atrás durante un accidente de coche, resulta útil ajustar el reposacabezas para que se ajuste cómodamente.

El latigazo cervical se cura con tratamiento basado en analgésicos para aliviar el dolor y con relajantes musculares para deshacer la contracción muscular. También se asocia con el uso de un collarín cervical especial que inmoviliza el cuello durante los primeros días. Dos semanas después de la curación es aconsejable iniciar la rehabilitación con ejercicios para fortalecer y estirar los músculos y reeducar el cuello para realizar los movimientos que normalmente realizaba.